Tras el aluvión de quejas derivadas de la cantidad de denuncias que, según el Seprona, Ecologistas en Acción y los Agentes forestales, quedan sin resolver en la Delegación de Medio Ambiente, el máximo responsable en Córdoba, Luis Rey, evitó ayer pronunciarse sobre el asunto.
Pese a que este periódico intentó en reiteradas ocasiones ponerse en contacto con él, tal hecho fue imposible ya que, según apuntaron desde la Delegación, «Rey se encuentra de vacaciones y ha dicho que no va a hablar sobre lo que se ha publicado».
Tres cuartos de lo mismo respondieron desde la Consejería, donde se remitieron a las declaraciones realizadas hace unos días por Rey, quien «ya aportó datos», explicaron fuentes de Medio Ambiente, pese a que las cifras manejadas por el delegado y con las que se defendió de las primeras críticas, no se correspondían con las que la propia Consejería recoge en su página web.
También fuentes de la Administración autonómica, en este caso de la Delegación en Córdoba desecharon la posibilidad de que, al encontrarse Rey de vacaciones, fuese el propio delegado del Gobierno andaluz, Antonio Márquez, quien saliese al frente de la situación, especialmente después de que IU pidiese el martes la dimisón del responsable provincial de Medio Ambiente y afirmara que el nombre de los supuestos infractores influye para que la denuncia se resuelva.
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