martes, 2 de octubre de 2007

El aire de nuestras ciudades está viciado


En España existe "otra verdad incómoda", como ayer señaló Luis Jiménez Herrero, director del Observatorio de la Sostenibilidad de España (OSE). Esa otra incomodidad es la que sufre una mayoría de la población española que vive en las ciudades de más de 100.000 habitantes: todos están obligados a respirar alarmantes niveles de gases y partículas peligrosas para la salud.

La OSE presentó ayer el primer informe de evaluación que se hace en nuestro país sobre la calidad del aire de las ciudades. El informe concluye que miles de muertes son evitables si se logran reducir los contaminantes. Según Cristina Narbona, ministra de Medio Ambiente, a los contaminantes se les atribuyen hasta 16.000 muertes cada año en España.

El informe, elaborado gracias a los datos de las estaciones de control de contaminantes de las ciudades, que han sido analizados por la Universidad Politécnica de Madrid, y la Carlos III, sólo tiene en cuenta seis agentes contaminantes: partículas en suspensión de menos de 10 micras (PM10) y de menos de 2,5 micras (PM2,5), el dióxido de azufre (SO2), dióxido de nitrógeno (NO2)), monóxido de carbono (CO), Compuestos Orgánicos Volátiles (VOC) y ozono troposférico (O3). En algunos compuestos, como el dióxido de nitrógeno, se supera el nivel de protección de la salud que entrará en vigor en 2010.

Otros agentes de los que existe menos información y que pueden ser más peligrosos todavía, como los metales pesados, los Compuestos Orgánicos Volátiles o las dioxinas, no se tienen en cuenta. Y tampoco las sinergias entre todos los contaminantes citados. "La gravedad sería mucho peor", declaró a EL MUNDO Fernando Prieto, qien a coordinado el análisis junto a Noelia Guaita.

El origen de tanta basura en la atmósfera se le atribuye básicamente al tráfico y a la actividad industrial, por lo que ciudades con menos de 100.000 habitantes, pero con determinadas industrias también están en la lista roja.

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